miércoles, 11 de abril de 2007

SISTEMA

Por Mari José Rojas.

Muy general y simple resulta una definición que valora el concepto de sistema como un método, plan o procedimiento de algo.
Pareciera que aquellos que se han aventurado a la aproximación de este concepto, tan sólo se han ocupado de averiguar sus funciones específicas dependiendo de la materia que investigan o estudian. En otro caso, se concentran meramente en acercarse a una dilucidación filosófica.
Lo anterior puede ser justificado desde el punto de vista de que la palabra sistema- en sí misma- suena muy amplia y compleja; sin embargo no imposible para que, nuestras capacidades traten de replantear y sugerir nuevas funciones del concepto.
Es necesario apuntar que por la dificultad y gran amplitud, que presenta el entender un concepto como el de sistema, nos hemos concentrado especialmente en la tarea principal que ocupa éste trabajo: redefinir el concepto para que un alumno de primaria, secundaria o bachillerato no nada más lo aprenda, sino que se apropie de éste y lo utilice algún día en su vida.
Los diccionarios comunes y corrientes, así como algunos, muy calificados y especializados nos disparan definiciones que para nosotros no son ajenas ni desconocidas, pero que si pareciera que se limitan a considerar un sistema como “un conjunto de reglas o principios sobre una materia, enlazados entre sí, o como un conjunto de cosas que ordenadamente relacionadas contribuyen a determinado fin.”[1]
Inmediatamente, las definiciones categorizan al sistema en partes y niveles que dependen del estudio o interés al que pretende acercarse. Entonces hallamos definiciones de sistema en el área biológica, tecnológica, política, social, etc.
Acertadamente se cuestiona José Ferrater Mora cuando explora ésta palabra. Para él, la palabra sistema entendida como: “conjunto de elementos relacionados entre sí y armónicamente conjugados”[2], resulta una definición suficiente para una idea común, pero no completa.
En primera, habría que preguntarnos si, estos elementos que forman el conjunto podemos entenderlos como conceptos o enunciados o son meras entidades y que carácter tiene esa conjugación.
Aquí llamo la atención sobre la dificultad que resulta, tanto definir como comprender un concepto como éste, si se tratara de excluir sus funciones y relaciones en cuanto a la materia que se examine, así como si se tomaran en cuenta con gran rigor esas funciones y relaciones.
Lo anterior se apunta porque en su uso común y corriente, el término se aplica a conceptos muy dispares.[3]
Ejemplo de lo anterior y que podemos explicarles a cualquier estudiante (primaria-bachillerato) sería: los ingenieros se interesan por los sistemas relacionados con cuestiones tecnológicas, los médicos, biólogos, etc., optan por categorizar sus sistemas en niveles, donde sobresalen partes funcionalmente relacionadas de los organismos vivos tales como: sistema respiratorio, digestivo, circulatorio, etc., así también, se encuentran los matemáticos que enfocan sus sistemas a un nivel más complejo para explicar sus números y operaciones, los científicos sociales hablan de sistemas económicos y políticos y los filósofos de sistema de ideas.[4]
Como ya mencioné, lo anterior es suficiente y válido si atendemos la función y relación en cuanto a tema o interés, pero ¿de qué manera ampliamos el concepto hasta el límite de la generalidad sin romper con su utilidad?
Apunto y sugiero de nueva cuenta una opinión que ya ha sido manifestada, pero que Anatol Rapoport, enfatiza en su exhausto análisis sobre la Teoría General de los Sistemas.
Una definición nueva de sistema podría llegar a incluir entidades nuevas, o de lo contrario excluir aquéllas que sus principios de organización no se especifiquen de manera parcial.[5]
Ejemplos de lo anterior y que así mismo es comprensible para cualquier alumno, sería el incluir entidades como el lenguaje.
De esta manera, podemos explicar que tanto el sistema digestivo, como el sistema solar y el lenguaje pueden ser valorados como sistemas.
Un niño de primaria que en sus clases, se familiariza con diversos temas en sus materias de Geografía, Ciencias Naturales y Español, fácilmente captará el sentido que le estamos dando a la definición de sistema.
Con el ejemplo de sistemas solar, diríamos que las entidades son el sol y los planetas; y sus relaciones se dan en cuanto a posición, velocidad y distancia.
Aunque pareciera un ejemplo típico, muy común para referir sistema en cuanto lo fisiológico para un niño de primaria, pensemos en la posibilidad de que un adolescente de secundaria ejemplifique esta idea de sistema conforme lo que hemos viniendo diciendo.
Aquí por ejemplo si se examina el sistema digestivo, explicaríamos a grandes pero concretos rasgos que las entidades van desde el funcionamiento de la boca hasta la de los intestinos, lo cual trataría de mostrar al sistema como un conjunto en el que ciertos órganos cooperan al desarrollo de una función en común, que ligado a otras funciones propias de otros sistemas, constituyen una función completa que nos permite desarrollarnos físico, intelecto y emocionalmente.
Un poco más complejo, resulta dar una definición para un joven de bachillerato que puede tener, mayor o menor interés en cualquiera de las siguientes áreas: las ciencias físico- matemáticas, biológicas, sociales o humanísticas.
Debido a lo anterior, sería fácil partir con una explicación suficiente para definir sistema ejemplificando con los sistemas fisiológicos. Sin embargo, quedaría corta esa explicación, considerando que nuestras capacidades podrían llegar a replantear este término, relacionándolo en el área social y humanística que como estudiantes de Historia ahora dominamos cierto grado de dificultad.
Para lo anterior, ubicaríamos al sistema en un nivel social; el joven alumno debe entender que nos referimos a “social”, tomando en cuenta esa interacción que se da en un grupo común.
Por lo tanto, en ese grupo común hay individuos, seres humanos que se encuentran interactuando entre sí.
Es muy importante que el alumno comprenda, que ese sistema social es el núcleo de los sistemas de acción humana y que agrupa entidades o partes que los llevan a realizar funciones específicas, de acuerdo a sus intereses y necesidades, así como a relacionarse entre sí.
Estas entidades o elementos, son el código de nuestro sistema social. Entonces tenemos elementos como el económico, la política, lo cultural, etc; entidades que permiten las relaciones de los individuos.
Por ejemplo: en una comunidad social, el elemento cultural juega un papel muy importante. Ya sea al nivel individual o colectivo se manifiestan una serie de intereses y objetivos, por ejemplo la existencia de valores como la moral, solidaridad, respeto, etc.; así como la creación de ciertas normas o la imposición de algunas obligaciones y la existencia de derechos para los integrantes de cualquier grupo social.
Sin embargo, no hay que omitir la importancia que ocupa la ubicación espacial, que es el ambiente que está presente en todo sistema social, ejemplo de éstos son el ambiente tecnológico, económico, político y cultural.
Agrego una vez más, el interés que causa incluir elementos como el lenguaje.
A cualquier alumno le podemos explicar que el lenguaje, puede ser valorado para ser calificado de sistema.
Así mismo, un niño de primaria puede entender que el lenguaje agrupa entidades como los morfemas, fonemas, las oraciones, etc., un muchacho de secundaria también y con mayor razón un joven de bachillerato.
En ésta no nueva, pero significativa propuesta, se trata de que el alumno comprenda que un sistema, no sólo se enfrasca en el área fisiológica o económica, sino que se puede incluir al lenguaje, explicando sus partes y las relaciones que existen y que se conjugan para coordinar y unir- por ejemplo- las palabras para formar oraciones y explicar conceptos.
El sistema de lenguaje puede anexar el mundo de referencia y a los que lo hablan. En este caso, las relaciones ya no sólo serían de tipo sintáctico, sino pragmático y semántico.
Concluyendo ésta tarea, podemos concordar con la exacta y no tan pretenciosa definición del concepto de sistema, que Anatol Rapoport examina en su ya mencionada Teoría General De los Sistemas; el sistema se puede entender como: “algo que se compone de un conjunto (finito o infinito) de entidades entre las que se dan una serie de relaciones especificadas, por lo que es posible deducir unas relaciones de otras o, de las relaciones entre las entidades, el comportamiento o la historia del sistema”.[6]

[1] Se revisaron distintos enfoques que se le han atribuido al concepto de sistema.
[2] Ferrater Mora, José. Diccionario de Filosofía. Madrid: Alianza, 1979, v.6.
[3] Anatol, Rapoport. Teoría General de los Sistemas en Enciclopedia Internacional de Ciencias Sociales, dirigida por David L. Siks, Madrid, Aguilar, 1976, v.9.
[4] Ibídem; v.9.
[5] Ibid.
[6] Anatol Rapoport, Op; cit. v.9.

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